El poder de la narrativa: cómo contar una buena historia

Captar y retener la atención de una audiencia se ha convertido en un desafío. Tanto en el ámbito empresarial como en el académico, el uso de narrativas es de gran valor. La clave es desarrollar una historia que con una estructura clara logre comunicar ideas complejas de manera fácil que muevan al público a la acción.

Las historias, desde tiempos antiguos, han sido el vehículo principal para transmitir conocimientos y valores. Las narrativas activan las áreas del cerebro relacionadas con la emoción y la memoria, generando respuestas mucho más intensas que cuando se escucha un mensaje meramente informativo. Esto no solo aumenta la retención de la información, sino que permite que la audiencia se identifique con los personajes y situaciones presentadas, lo que refuerza la efectividad del mensaje. Emociones como el suspenso, la empatía, la sorpresa y el entusiasmo, pueden ser inducidas a través de una historia bien estructurada.

Existen múltiples estructuras narrativas que, a lo largo de los años, han demostrado ser eficaces para captar la atención del público. A continuación, apuntamos algunas de las más conocidas y sus aplicaciones en el contexto de presentaciones.

-El “Viaje del Héroe,” una estructura descrita ampliamente por Joseph Campbell, se basa en un arco narrativo donde el protagonista enfrenta desafíos, aprende lecciones y regresa transformado. En las presentaciones, esta estructura puede ser empleada para inspirar a la audiencia a través de historias de resiliencia y superación. Por ejemplo, Steve Jobs, en muchas de sus presentaciones, narraba su experiencia personal, especialmente su expulsión y posterior regreso a Apple, como un viaje de superación y aprendizaje. Esta narrativa resonaba con el público, ya que reflejaba la idea de que los fracasos pueden ser el preludio de grandes logros.

-Otra estructura es la de “La Montaña,” que enfatiza la acumulación de obstáculos que culminan en un clímax final. Elon Musk utiliza esta estructura cuando relata la historia de SpaceX, abordando los obstáculos técnicos y financieros que enfrentó en su búsqueda de crear un cohete reutilizable. En este tipo de narrativa, la audiencia es llevada a través de una serie de desafíos cada vez mayores que generan tensión y expectativa hasta el logro final. Esta técnica permite que el público se sienta parte del proceso, compartiendo tanto las dificultades como las victorias.

-Los “Bucles Anidados” consisten en contar varias historias interrelacionadas que, juntas, refuerzan un mensaje central. Oprah Winfrey es conocida por utilizar esta técnica en sus discursos, donde relata tanto sus experiencias personales como las de personas que ha entrevistado. Esto permite a la audiencia ver cómo diferentes vivencias se entrelazan y construyen un mensaje poderoso de superación y crecimiento. La autenticidad y la conexión emocional en esta estructura hacen que el mensaje sea memorable y cercano.

Algunos de los discursos más impactantes de la historia se han basado en el poder de una narrativa bien construida. Por ejemplo, en la presentación del primer iPhone, Steve Jobs empleó la técnica de “Ideas Convergentes.” Mostró cómo la integración de un teléfono, un iPod y un dispositivo de internet en un solo producto no solo era una innovación tecnológica, sino una revolución en la manera de comunicarnos y entretenernos. Esta narrativa de convergencia no solo capturó la atención del público, sino que los invitó a ver el iPhone como el futuro de la tecnología.

En su famoso discurso “I Have a Dream,” Martin Luther King, Jr. utilizó la técnica de “Sparklines,” donde contrastaba la realidad actual de segregación racial con su visión de un futuro de igualdad. Al alternar entre “lo que es” y “lo que podría ser,” King no solo transmitía un mensaje de esperanza, sino que impulsaba a su audiencia a tomar acción hacia ese futuro deseado.

Existen algunos consejos prácticos que todo narrador ha de tener en cuenta a la hora de construir una gran historia:

-Conocer la audiencia: Adaptar la narrativa a los intereses y valores del público es crucial para captar su atención.

-Definir un propósito claro: Cada historia debe tener un mensaje principal que se alinee con el objetivo de la presentación.

-Utilizar un protagonista: Contar la historia desde la perspectiva de un personaje, ya sea uno mismo o alguien más, permite que el público se conecte emocionalmente.

-Construir un arco narrativo: la historia debe tener un inicio, un desarrollo y un clímax.

-Incluir detalles sensoriales y emocionales: Los detalles que estimulan los sentidos o las emociones crean una conexión más profunda y duradera.

En el contexto empresarial, el uso de narrativas ayuda a humanizar los datos, haciendo que la audiencia conecte con los conceptos de manera más emocional y significativa. Las historias permiten que los empleados, inversores o clientes vean el valor detrás de los números, logrando una comunicación más efectiva y motivadora. Una narrativa bien estructurada en una presentación de negocios puede, por ejemplo, ilustrar el impacto de un proyecto en la comunidad, destacar los esfuerzos de un equipo en particular o contar la historia de la evolución de un producto desde su concepción hasta su éxito en el mercado.