Caso YouTube: los cuatro pilares
YouTube comenzó como Google. Una startup ideada en un garaje y que supo leer muy bien internet y los vientos de cambio que se avecinaban. Lo mismo le pasó a Susan Wojcicki, directiva encargada de competir con la plataforma de vídeos con Google Vídeos.
Google invirtió muchos millones y recursos en Google Vídeos para ser el líder en su sector. No lo consiguió. Ante este fracaso, Wojcicki comenzó a darle vueltas a la compra de YouTube. Comunicó a la Junta y a los accionistas, que lo mejor para Google era la compra de esta startup y olvidarse Google Vídeos, ya que solo por intentar posicionarse como YouTube, les costaría 1.500 millones de dólares más de lo que tenían previsto.
La adquisición se realizó por 1.650 millones de dólares (1.300 millones de euros) en 2006. El tiempo le dio la razón. Ahora YouTube vale unos 70.000 millones y tiene más de un millón de visitantes únicos al día. Todo un éxito.
Hasta llegar a este valor, tuvo que hacer frente a un reto muy complejo: transformar YouTube en un proveedor oficial de contenidos creíbles y competitivos con una competencia consolidada y con recursos. La industria de la música y Hollywood se lo pusieron complicado. Entre otras cosas, acusaron a YouTube de que infringir las leyes de la propiedad intelectual con los vídeos que subían sus usuarios.
Pero lo superó. Desde el momento en que Wojcicki tomó las riendas de YouTube buscó tentar a los anunciantes de la televisión e introdujo innovaciones en el servicio como las suscripciones, el contenido original, el contenido 3D y la realidad virtual.
Según Alberto González Pascual, Director de Transformación Cultural de Prisa, el éxito de Youtube se debe a que Wojcicki tenía claro lo que quería conseguir y en dónde apoyarse:
- Iniciar el cambio mientras se esté creciendo. Es decir, antes de que nos fuercen a cambiar para sobrevivir. Si se toma la iniciativa es más fácil dar con la tecla correcta. En cambio, si se espera a estar contra las cuerdas, se hará rápido y mal.
- Rodearse de expertos con talento. Personas que orientan a la empresa hacia una nueva dirección. En el caso de YouTube, Wojcicki fichó en 2015 a Susanne Daniels, una de las programadoras de televisión de Estados Unidos para audiencias juveniles. Una incorporación que potenció el valor de la marca.
- Procesos productivos alternativos con autonomía operativa. Esto permite desarrollar y comercial nuevos productos de una manera eficaz y eficiente. Un ejemplo es el lanzamiento de la marca de suscripción RED, que incluye el estreno de 30 series y películas de producción original de Youtube.
- Cultivar una mentalidad proclive a la disrupción. Los equipos aprenden a crear e impulsar nuevos productos y servicios. Es decir, cultivar en la organización una mentalidad proclive al cambio.
Estos puntos son los cuatro pilares que utilizó YouTube para conseguir posicionarse como una de las empresas líderes de su sector hasta conseguir una valoración empresarial de 70.000 millones de dólares.
Comments are closed.