La Comisión revisa las normas del Sector de los Seguros

Tal y como anunciamos en la agenda de septiembre, este miércoles el Colegio de Comisarios ha aprobado la Propuesta de modificación de la Directiva Solvencia II y una nueva Directiva de Recuperación y Resolución de Seguros.

¿Por qué era necesario revisar las normas de la UE sobre seguros y reaseguros?

La Directiva Solvencia II (Directiva 2009/138/CE) exige a la Comisión Europea que lleve a cabo una revisión de las normas de la UE en materia de seguros y reaseguros (es decir, los seguros para las compañías de seguros). Pero más allá de esta obligación legal, la revisión es una oportunidad para reflexionar más ampliamente sobre las lecciones aprendidas de los primeros años de aplicación de estas normas, incluso durante la crisis de COVID-19.

Como el sector de los seguros posee grandes volúmenes de inversiones, podría contribuir de forma significativa a la recuperación de Europa tras la crisis de COVID-19, la realización de la Unión de los Mercados de Capitales y el Green Deal europeo.

¿Ha afectado la crisis de COVID-19 al sector de los seguros?

En general, la posición financiera de las aseguradoras no se vio afectada de forma significativa por la crisis de COVID-19 y a pesar de las dificultades operativas, no se observaron grandes perturbaciones en el sector. En particular, el sector se mantuvo bien capitalizado, con un coeficiente de solvencia medio del 235% a finales de 2020, según datos de la Autoridad Europea de Seguros y Pensiones de Jubilación. Aunque esta ratio es 7 puntos porcentuales menos que a finales de 2019, sigue estando muy por encima del mínimo reglamentario del 100%.

¿Cuál es el objetivo de revisar Solvencia II?

La revisión actual refuerza la contribución de las aseguradoras europeas a la financiación de la recuperación, avanzando en la Unión de Mercados de Capitales y en la canalización de fondos hacia el «Green Deal» europeo.

La experiencia reciente ha demostrado que las aseguradoras mejoraron su gestión del riesgo durante los primeros años de aplicación de las normas de Solvencia II. Sin embargo, la crisis de COVID-19 también ha puesto de manifiesto que el riesgo de los bajos tipos de interés debe tomarse en serio. Abordar este riesgo era uno de los objetivos perseguidos por la Comisión durante la revisión.

Solvencia II es un conjunto de normas muy sofisticado que debe aplicarse de forma proporcionada a las (re)aseguradoras más pequeñas y menos complejas. El actual principio de proporcionalidad de alto nivel incluido en Solvencia II no ha dado el resultado deseado, por lo que se necesitan normas más concretas para garantizar que la proporcionalidad desempeñe un mayor papel en la aplicación de las normas.

La crisis de COVID-19 también ha puesto de manifiesto la oportunidad de mejorar las herramientas de supervisión y gestión de crisis, que pueden representar una fuente de riesgo para la estabilidad del sistema financiero en un futuro.

«Europa necesita un sector de seguros fuerte y dinámico, que invierta en nuestra economía y nos ayude a gestionar los riesgos que afrontamos. Gracias a su doble papel de protector e inversor, el sector de seguros puede contribuir al Pacto Verde Europeo y la Unión de los Mercados de Capitales. Las propuestas de hoy garantizan que, al hacerse más proporcionadas, nuestras normas sigan siendo adecuadas para los fines que persiguen»

Valdis Dombrovski
Vicepresidente Ejecutivo Responsable de ‘Una Economía al Servicio de las Personas’

Próximos pasos

El Parlamento Europeo y el Consejo debatirán ahora las propuestas de la Comisión. Paralelamente, la Comisión iniciará los trabajos sobre los actos delegados que complementan las modificaciones de la Directiva Solvencia II.

Algunas de las características de esta revisión son:

  1. Proteger mejor a los consumidores y garantizar que las compañías de seguros sigan siendo sólidas, incluso en tiempos económicos difíciles.
  2. Conseguir que los tomadores de seguros estén mejor informados sobre la situación financiera de su aseguradora.
  3. Proteger mejor al tomador de seguros cuando compre productos de seguros en otros Estados miembros gracias a la mejora de la cooperación entre supervisores.
  4. Incentivar a los aseguradores a invertir más en capital a largo plazo para la economía;
  5. Obligar a la solidez financiera de las aseguradoras a tener más en cuenta determinados riesgos, incluidos los relacionados con el clima, para ser así menos sensible a las fluctuaciones del mercado a corto plazo.
  6. Vigilar al sector en su conjunto para evitar que se ponga en riesgo su estabilidad.

¿Cuál será el impacto final de la reforma en los requisitos de capital para (re)aseguradoras?

En general, el objetivo es lograr una revisión equilibrada y evitar un deterioro de la posición de solvencia de las aseguradoras a nivel de la UE. No es necesario un endurecimiento de los requisitos de capital en general teniendo en cuenta la situación ya bastante sólida del sector de los seguros en Europa.

Las modificaciones que hacen más estrictos determinados requisitos de capital se aplicarán gradualmente hasta 2032. La Comisión calcula que a corto plazo podrían liberarse hasta 90.000 millones de euros de capital a nivel de la UE.

Sin embargo, algunas (re)aseguradoras o mercados podrían enfrentarse a un aumento de los requisitos de capital. La aplicación progresiva de requisitos de capital más estrictos tiene por objeto facilitar la preparación oportuna de los (re)aseguradores para las nuevas normas.

Dependiendo de las condiciones del mercado financiero, la Comisión estima que hasta 30.000 millones de euros de capital podría liberarse a largo plazo a nivel de la UE. Esto también debería ayudar a las aseguradoras a aumentar su financiación de la recuperación.

¿Qué significa la propuesta para las aseguradoras más pequeñas?

La propuesta propone una ampliación significativa de los umbrales de tamaño que determinan el ámbito de aplicación de la Directiva. Esto significa que las aseguradoras más pequeñas quedarán excluidas del ámbito de aplicación de la Directiva y se someterán a los regímenes nacionales. Ello debería traducirse en menores costes de cumplimiento de la legislación de la UE para las empresas más pequeñas que no deseen estar sujetas a Solvencia II.

Además, a fin de simplificar las normas para las aseguradoras pequeñas y menos complejas, se creará una nueva categoría de (re)aseguradoras de bajo riesgo. Se basa en criterios claros y transparentes. Los aseguradores de esta categoría se beneficiarán de normas más ligeras y proporcionadas. Los demás aseguradores podrán seguir beneficiándose de medidas de proporcionalidad, previa aprobación de la supervisión.

«Esto ayudará al sector de los seguros a dar un paso al frente y cumplir su papel en la economía. Hacemos posible la inversión en la recuperación, y fomentamos la participación de las compañías de seguros en los mercados de capitales de la UE. Esto facilitará la inversión a largo plazo, de tanta importancia para la Unión de los Mercados de Capitales (UMC). Nuestra Unión de Mercados de Capitales es clave para nuestro futuro ecológico y digital. Además nos cercioramos de que los tomadores de seguros pueden confiar en estar mejor protegidos si su aseguradora atraviesa dificultades».

Mairead McGuinness
Comisaria de Servicios Financieros, Estabilidad Financiera y UMC